Gabriel García Márquez se ha retirado de la vida pública por razones de salud: cáncer linfático. Ahora, parece, que es cada vez más grave. Ha enviado una carta de despedida a sus amigos, y gracias a Internet está siendo difundida.Les recomiendo su lectura porque es verdaderamente conmovedor este corto texto escrito por uno de los Latinoamericanos más brillantes de los últimos tiempos.
Aquí estoy con un tema de necesaria simplificación de ideas. Aunque lo veáis complicado no lo es. Es sólo pararse a analizar situaciones que nos rodean, que nos hacen preguntarnos cosas, reflexiones pérdidas que importunan nuestra existencia con pequeñas dudas que se engrandecen con el paso de los días. A mí, ahora, me está pasando...
Es para mí un honor y un privilegio para nuestro amado Rincón el poder enviaros un escrito de uno de sus integrantes más recientes, filólogo especialista en culturas clásicas, actualmente coordinador-profesor del Instituto Cervantes en su sede holandesa, y familiar muy cercano de quien os habla...
No todos los individuos gozan de las mismas oportunidades, pues las circunstancias familiares y sociales condicionan su visión del mundo. Sin embargo, ante adversidades parecidas cada persona reacciona de manera diferente: unos se crecen y tratan de buscar soluciones, mientras que otros se encogen, recreados en su desgracia, y martirizan al prójimo con su lamento perpetuo.
Si pudiera vivir nuevamente mí vida, en la próxima trataría de cometer más errores. No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más, sería más tonto de lo que he sido, de hecho...