¡Qué noche la de aquel año!
parentesys

¡Qué noche la de aquel año!

Comienzo la semana con un fondo de inevitable tristeza. Y es que cuando se ha disfrutado de una felicidad que puede considerarse absoluta, dure el tiempo que dure, ¿cómo no sentirse desgarrado frente al insoportable anhelo de su retorno? Digo esto porque tuve la oportunidad el viernes noche de considerarme un hombre realmente privilegiado al haber disfrutado durante unas maravillosas horas de lo más valioso que alguien en este viciado mundo pueda desear (y) tener:

25 nov 2002


Comienzo la semana con un fondo de inevitable tristeza. Y es que cuando se ha disfrutado de una felicidad que puede considerarse absoluta, dure el tiempo que dure, ¿cómo no sentirse desgarrado frente al insoportable anhelo de su retorno? Digo esto porque tuve la oportunidad el viernes noche de considerarme un hombre realmente privilegiado al haber disfrutado durante unas maravillosas horas de lo más valioso que alguien en este viciado mundo pueda desear (y) tener: la compañía real, sincera, veraz y extraordinaria de un grupo irrepetible de personas por el que siento auténtica devoción y me percibo auténticamente querido y estimado; un conjunto de seres excepcionales cuya amistad es una joya de inusitado y deslumbrante resplandor. Iluminó mi corazón como hacía mucho, mucho tiempo no me ocurría, y este suceso, que para mí fue bello, memorable y extraordinario, ocupará desde ahora y para siempre un lugar privilegiado en los altares de mi memoria. Así que mientras trato de obligar a mi mente a que acepte de nuevo el gris transcurrir del tiempo laboral, ese insufrible contrapunto al tiempo mítico (mucho más real y determinante para las experiencias de crecimiento interior que el supuestamente más real devenir cotidiano) de la euforia asentada en los inquebrantables lazos afectivos a que antes me refería, hago una rápida recopilación de lo visto hasta el momento presente con la intención de ofrecer un sucinto y acertado comentario al respecto:

Andrew Bergman: Luna de miel para tres. Floja comedia donde un desquiciado Nicholas Cage se enfrenta a las manipulaciones malévolas de una James Caan (qué talento tiene este hombre) a la caza y captura de la doncella en pugna (atractiva Sarah Jessica Parker). Provoca tedio. La BSO conformada por versiones de temas del legendario Elvis es lo más destacable de este prescindible film.

Charles Vidor: El Cisne. Sólido y robusto melodrama del año 1959, que supone un tono narrativo "in crescendo", nutrido con diálogos trabajados y brillantes, ofreciendo una magnífica actuación de la bellísima Grace Kelly. La metáfora del animal divinizado en su majestuoso entorno pero torpe cuando curiosea en medio de territorios inexplorados, más terrenales, funciona a la perfección para ofrecer un final ambiguo y con un fondo de insondable resignación y tristeza. Película, en fin, ciertamente extraordinaria.

George Cukor: Chica para matrimonio. El maestro Cukor se muestra hábil desde la propia concepción de esta producción de 1952, presentándola como una comedia ligera para captar al espectador desprevenido, que a poco que use su inteligencia pronto se verá "enganchado" en la historia rememorada por dos cónyuges al borde de la separación matrimonial, viéndose de esta forma recompensado por una irónica, sutil y honda reflexión a vueltas con el machismo y la todopoderosa institución matrimonial: monstruos sometidos a un juicio objetivo no exento de cierta compasión. Judy Holliday y Aldo Ray lo bordan. Muy Buena.

Joseph L. Mankiewicz: Mujeres en Venecia. Rex Harrison y Cliff Robertson construyen una perversa comedia dentro de la perversa comedia que de por sí constituye el propio film. En la estela de "La Huella" o "El día de los tramposos", el gran Mankiewicz juega con nosotros, ingenuos espectadores, moviendo los hilos de nuestra credulidad con habilísima inteligencia, regalándonos por añadidura una escéptica y lúcida reflexión acerca del amor, el tiempo y el poder, asuntos todos ellos enmarcados en esa teatralidad tan estúpida en que a veces se transforma nuestra propia existencia. Rebosante de perspicacia e inteligencia. Magistral.

Miguel Picazo: Extramuros. Este importante realizador hispano ("La tía Tula") nos regala un auténtico clásico del cine español, hurgando con valentía y aplomo narrativo en uno de los temas más espinosos que puedan imaginarse: la invención de lo sobrenatural, de la intervención divina, del milagro, por parte de lo meramente humano. Con un grupo de actrices y actores en estado de gracia (nunca mejor dicho), la adaptación de la novela de Jesús Fernández Santos ofrece una oscura y asfixiante reflexión acerca de los enigmáticos mecanismos responsables de las señales divinas, en este caso la aparición de unos "misteriosos" estigmas. Las tácticas y estrategias de poder-saber revisten las voluptuosidades de los cuerpos y los descuartizan en fragmentos de misticismo y masoquismo moral a partes iguales. La lectura política, más allá del contexto de la España de Felipe II, también aflora con fuerza denunciando la ignorancia implícita en todo tipo de superstición asumida sin crítica. Un tenebroso y hermosísimo espectáculo decadente imprescindible para los amantes del buen cine y los grandes relatos. Muy Buena.

Patrice Leconte: La maté porque era mía. Alocada y extraordinaria comedia de este gran realizador francés, que sabe conjugar en este trabajo una fina ironía misógina con un análisis despiadado y corrosivo de las relaciones de pareja. La mujer se nos aparece como un ser enigmático y perverso, dueña absoluta de las riendas de la existencia masculina aun después de la humillación o la ruptura definitiva. Muy mala uva para una excelente película especialmente recomendable para parejas enamoradas y matrimonios con apariencia de estabilidad. Los actores, Philipe Noiret, Carole Bouquet, Richard Bohringer y Jean Rochefort, están sencillamente perfectos. Desternillante.

 

Y hoy me marcho con la sensación, lo remarco, de ser un hombre afortunado al poder contar con intangibles más allá de las leyes del podrido mercado, que ni se compran ni se venden: amor, cariño y verdadera amistad. Sólo por eso merece la pena seguir en esta absurda lucha que es la existencia. De ahí, posiblemente, su grandeza.

 

 

Temas relacionados:

Opiniones de este contenido

Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.




 No hay opiniones. Sé el primero en escribir.


Tu opinión

El Arte del Bonsái Ficus - Variedades

 3
  
 219232

English Adverbios de Frecuencia

 10
  
 202805

Informática Generador de códigos de barras en PHP

 13
  
 164919

Quejas denuncias estafas Descubre quién te visita en Facebook?

 16
  
 140156

English Something - Anything

 2
  
 131544

Marketing digital Cómo ganar dinero con un periódico o revista digital

 2
  
 127994

Informática Mejores herramientas para Eventos Virtuales

 1
  
 99623

OTROS MISCELANEA El permiso por puntos Español

 0
  
 88173

Actualidad Las profesiones que van a desaparecer.

 0
  
 86269

Autores

Admin

Este autor tiene 31 artículos publicados.

PARENTESYS

Este autor tiene 13 artículos publicados.

MILES

Este autor tiene 3 artículos publicados.


Newsletter

Suscríbete a nuestros boletines