LA MALA FORTUNA SE CEBA CON UN REAL MADRID QUE NO LOGRÓ PASAR DEL EMPATE EN RIAZOR

Pero vamos a ver, ¿alguien en su sano juicio piensa que el Real Madrid antes del partido disputado el sábado a las 22 horas contra el Deportivo tenía la liga en el bolsillo? ¡¡Venga ya!! Seamos realistas, la Liga está prácticamente perdida desde que el Madrid se puso a 7 puntos tras su derrota en el campo del Osasuna. Lo hemos dicho por activa y por pasiva: el Madrid debe utilizar la liga como campo de pruebas para afrontar con auténticas posibilidades de éxito ambas Copas, que le están esperando con los brazos abiertos. ¿El partido? Pues es evidente que el Madrid mereció mucho más por lo exhibido en el terreno de juego durante buena parte de los noventa minutos, especialmente en el segundo asalto de la contienda, convertido ya el campo del Depor en una ciudadela completamente asediada. Pero el partido no fue sencillo en ningún momento, dado que el rival propuso un entramado defensivo muy sólido donde Marcelo se sintió muy incómodo con Guardado en la banda izquierda, y Xabi anduvo siempre muy presionado por Juan Rodríguez, del que finalmente pudo zafarse en el segundo acto. Allí Mou puso toda la artillería pesada sacando a Di María pegadito a la cal y con Adebayor y Benzema en busca del tanto que pudiera darnos el triunfo. El gran Cristiano  realizó un prodigioso eslalon que acabó con un poderoso disparo estrellado en el palo, Adebayor remató en la parte baja del poste, y Benzema se trastabilló incomprensiblemente con el balón cuando lo más fácil era poner la bota y dejar que el esférico atravesara la línea de gol… Mala suerte, nada más. No hay otra razón ni conviene apelar a otras excusas. Lo que sí interesa es no perder la concentración para los futuros compromisos coperos, que son los que pueden marcar la diferencia entre la gloria y el infierno. La liga es ya la Fata Morgana del proyecto mourinhista, y debe servir de guía sin nublar los sentidos, con la mira puesta en realidades más tangibles.

¿El waka Braça? Como siempre, pasándolo realmente mal durante los primeros treinta minutos y viniendo a su rescate el de siempre, un inspirado Messi que tiró por los suelos cualquier esperanza de recortar distancias. Pero no se ve bien a ese equipo, al menos no todo lo bien que los voceros de la prensa catalana tratan por todos los medios de vendernos, y es que las ausencias significativas de Puyol y Xavi tienen que notarse de una forma significativa dentro del engranaje c(h)ulé, lo que sin embargo no es óbice para que mantengan una cómoda diferencia de puntos respecto a su inmediato perseguidor. Y si nada o nadie lo remedia, está será desgraciadamente la pauta que veremos repetida una y otra vez, insisto, en la Liga.

¿Más? El empate del Atlético de Madrid contra un famélico Sevilla, que se llevó un punto del Calderón de forma totalmente inmerecida, las tablas del Getafe en campo del Hércules, valiosísimas para la tranquilidad de los azulones, y la victoria del Valencia del que esperamos un milagro el miércoles contra los shakiros. Apelemos desde aquí a todas las furias para que se manifiesten en forma de ayudas arbitrales (cosa que el equipo valencianista ya suele conseguir habitualmente), cuanto más clamorosas mejor, para que el equipo levantino sea, sobre todo, más levantisco que nunca y se quede con los tres puntos en mala lid.

Esta misma noche se la juega Pelle, el Conquistado, en un encuentro agónico que se nos antoja decisivo en la lucha por la salvación de ambos equipos, Málaga y Almería ¿Lo conseguirá? Espero que obtenga un buen resultado en este encuentro porque el próximo jueves visita el Bernabéu, una plaza hasta ahora inexpugnable en la que puntuar siendo visitante resulta prácticamente imposible. Se adivina morbo en los banquillos. ¿Qué opináis?